“Uno de los atributos de nuestra marca es la calidad”, esta es una de las frases con las que Carlos Espinosa comienza su exposición. Cuando el automóvil fue inventado por dos ingenieros alemanes, Daimler y Benz, nace con una vocación de universalidad y ya lo hace con unas campañas publicitarias coincidentes con el tema de la calidad.

El compromiso por la excelencia de la compañía se ve reflejado en una pirámide que recoge esta filosofía en base a cuatro valores: la pasión, sentir una pasión por lo que se produce; respeto, que gira en torno a la obligación de respetar el entorno en el que vivimos; integridad y disciplina. Estos contribuyen a alcanzar un alto rendimiento que lleve a una excelencia operativa para obtener productos de calidad orientados al cliente, con una presencia global de la empresa. Todo ello con un objetivo último, el crecimiento rentable.

Cuando habla de excelencia operativa se centra en la existencia de unos procesos eficientes con una mejora continua. Mercedes ha creído en procesos, en una organización para estar en posiciones de liderazgo, de acuerdo con los requisitos legales del entorno donde están localizados.

Mercedes tiene presente la importancia de adaptarse a los deseos del cliente, hoy en día tienen una gama de productos ampliada, debido a que el mundo actual está caracterizado por la segmentación, los consumidores son cada vez más exigentes. Tienen actualmente quince modelos distintos con varias versiones, que dan lugar a un total de ciento ochenta y cinco versiones en total. Este hecho dificulta la comercialización de los productos y la diferenciación de los mismos.

Las marcas en la compañía tienen una relevancia fundamental, ya que Mercedes-Benz es “la marca a la que aspira la gente”, afirmó Carlos Espinosa. Los dos objetivos en los que se apoya son el conservar la fidelidad a la marca de los que ya tienen un coche de la compañía y lograr que el ser propietario de este sea el sueño de muchos. Para conseguirlo se basa en una serie de valores, siendo el valor más importante la calidad. Ello lo realiza a través de una estrategia de diferenciación de la marca, donde el I+D va a jugar un papel clave, el público percibe un producto de calidad, no solo por las prestaciones sino porque sea una marca que esté en la vanguardia. “Mantenernos en cabeza en I+D es uno de los objetivos de nuestra empresa porque seguimos pensando en productos de calidad” expuso Espinosa. Un ejemplo de esta preocupación es la investigación que están realizando relativa a la “Conducción sin accidentes” y a desarrollar tecnologías limpias. También destaca la inversión en formación y desarrollo, ya que las personas son la llave del éxito, ellas transforman la posibilidad en realidad.

En relación a la crisis económica, Carlos Espinosa establece que este año después de catorce años de crecimiento continuado, van a caer las ventas pero con una caída inferior a la sufrida en los mercados. Para afrontar este situación, Mercedes ha elaborado un plan internos con cuatro principios básicos:

1. Lanzamiento de nuevos productos acordes con los deseos de los clientes
2. Establecimiento de políticas de eficiencia
3. Mantenimiento del eje de la calidad
4. Satisfacción del cliente, a través del “mistery shopping”