Leopoldo Fernández Pujals - JAZZTEL

Hay dos tipos de creatividad: la constructiva y la destructiva. "La destructiva se llama “excusitis”.

"Si uno continuamente mejora y cumple los objetivos y enseña a hacer esto a la gente que trabaja en su organización, estará creando una maquinaria humana imparable."

Emprendedores de Éxtito

Leopoldo Fernández Pujals de JAZZTEL en el Foro EMPRESA 2005

Leopoldo Fernández Pujals.
Presidente de Jazztel

A pesar de haber estado en diferentes compañías, y en estos momentos estar en la nueva aventura de Jazztel, aquí he venido a hablar de emprendedores, a intentar trasladar cuales son los principios en los que he apoyado a lo largo de toda mi vida para emprender y consolidar los negocios en los cuales he desarrollado mi vida profesional y empresarial. Mi ponencia tratará de explicarles lo que significa ser emprendedor.

En primer lugar me gustaría trasladarles la evolución del pensamiento, en primer lugar tenemos una idea, esa idea la convertimos en palabra y empezamos a comprometernos, luego nuestra fuerza de voluntad nos hace pasar a la acción, estas acciones son las que nos crean los hábitos que lógicamente deben de ser buenos, lo cual forja nuestro carácter y este carácter es el que define nuestro destino.

Cualquier empleado puede convertirse en un empresario, solo hace falta recurso humano (el mismo), físico (se puede comprar) y financiero (o bien ahorro o préstamo), pero existe una gran diferencia entre empresario y emprendedor, el emprendedor tiene un sueño su visión de lo quiere, su oasis, para eso crea una organización a la cual le marca unos objetivos y define la estrategia para conseguirlos. Leopoldo Fernández Pujals de JAZZTEL en el Foro EMPRESA 2005

Pero la diferencia entre ser empresario y ser empresario emprendedor está en el crecimiento, en la velocidad de este.

Todo empresario debe tener una forma de pensar y de actual tal que vaya siempre de la visión a la misión: la visión es un sueño, y debe ser compatible con la ideología del individuo, debe ser renovable, debe ser beneficiosa, fructífera y sobre todo lograble. Cada uno se pone su misión, pero les diré una cosa: si piensas en grande logras más que si piensas en pequeño. La misión es la razón o causa por la que una empresa existe, debe mover a todo el equipo, debe ser lograble pero interminable. La misión se descompone en los objetivos, que deben ayudar al cumplimiento de esta y deben ser creativos.

Hay dos tipos de creatividad: la constructiva y la destructiva. La destructiva se llama “excusitis”. Hay que tener una mentalidad constructiva para dar ideas acerca de la consecución de los objetivos y de la misión.

En la vida en general y en la vida empresarial en particular las personas tenemos a menudo malos hábitos. Hay que repetir comportamientos para que se conviertan en buenos hábitos. Uno no se puede permitir en esta vida malos hábitos, porque estos te hacen nadar contracorriente, y te agotas antes. Hay que nadar a favor de la corriente.

Todo el mundo debería tener claros sus objetivos para el día siguiente antes de acostarse, tenerlos planificados y organizados, y medir a lo largo del día si lo ejecutado cumple los objetivos, analizando y haciendo modificaciones para mejorar al día siguiente.
Si uno continuamente mejora y cumple los objetivos y enseña a hacer esto a la gente que trabaja en su organización estará creando una maquinaria humana imparable.

Yo considero que hay varias etapas en la vida o en cada proyecto de un empresario emprendedor:

Una primera etapa es la del genio: al genio se le ocurre la idea y realiza un proceso de reflexión y asesoramiento.
La segunda etapa es la del dictador benevolente, en la que el emprendedor está completamente volcado en el crecimiento de la compañía.
Cuando la empresa llega a un tamaño con el cual comienza a frenarse pasa a la última etapa, en la que el emprendedor delega y comienza a desinteresarse, y lo que suele hacer es vender, ya que su negocio tienen un gran valor, para comenzar otro proyecto ilusionante.
Si se pasa esta etapa pasas a la última etapa que es la de visionario, en la que trasladas tu sueño a toda la organización.

Les diré que no hay una receta mágica para triunfar, sino que hay diferentes sueños, y considero al éxito cumplir los sueños de cada uno. Hay unos ingredientes, son los que les he trasladado, pero cada uno de ustedes debe de confeccionar su propia receta.

Mesa Redonda: Leopoldo Fernández Pujals de JAZZTEL y Félix Tena de IMAGINARIUM.

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Zaragoza, 10 de noviembre de 2006.

Leopoldo Fernández Pujals de JAZZTEL en el Foro EMPRESA 2005

Leopoldo Fernández Pujals es el Presidente de Jazztel, un operador líder en telecomunicaciones y transmisión de datos, con infraestructura propia en España, que ofrece soluciones de banda ancha para el tráfico de voz, datos e Internet, destinadas a pequeñas y medianas empresas.

Leopoldo Fernández Pujals nació en Cuba y a la edad de 13 años emigró a los Estados Unidos. En 1968 ingresó en el ejército de los Estados Unidos y luchó en la guerra del Vietnam. Comenzó sus primeros pasos laborales en Procter&Gamble para después cambiar a Johnson&Johnson, que le enviará a España en 1981. En 1987, con 40 años, Leopoldo Pujals y su hermano Eduardo abrieron un establecimiento de ventas de pizzas con un capital de diez millones pesetas bajo el nombre de PizzaPhone. Al cabo de un año cambiaron el nombre de su empresa por TelePizza, empresa que dejó en 1999. Desde Septiembre de 2004, es el Presidente de Jazztel.

"Si uno continuamente mejora y cumple los objetivos y enseña a hacer esto a la gente que trabaja en su organización estará creando una maquinaria humana imparable."

Instituto Aragonés de Fomento

Aragón Empresa

Leopoldo Fernández Pujals - JAZZTEL

Hay dos tipos de creatividad: la constructiva y la destructiva. "La destructiva se llama “excusitis”.

"Si uno continuamente mejora y cumple los objetivos y enseña a hacer esto a la gente que trabaja en su organización, estará creando una maquinaria humana imparable."

Mesa Redonda: Leopoldo Fernández Pujals de JAZZTEL y Félix Tena de IMAGINARIUM.